Atendiendo a la natural preocupación de miles de vecinos respecto a la real calidad del agua potable, nuestra Agrupación tomó la decisión de ordenar un completo análisis a este vital elemento que reciben gran parte de los hogares de la provincia de San Antonio por parte de la empresa ESVAL.
De esta manera, se eligió contratar los servicios de un laboratorio que garantizara óptimos niveles de profesionalismo y seriedad, y que además contara con plena acreditación en cuanto a competencias técnicas y estándares internacionales (NCh ISO 17025.Of2005).
Se trata de SILOB Chile, empresa de la región de Valparaíso con más de 30 años de experiencia, se encargó de tomar el muestreo y del posterior análisis físico-químico y microbiológico en junio recién pasado, el cual se concentró en las tablas 1, 2 y 7 de la NCh409.
Los resultados, entregados hace pocos días, resultan de máxima gravedad: el agua potable de ESVAL supera los límites permitidos por la norma sanitaria chilena en dos importantes ítems: cloruros y sólidos disueltos.
Y no solo supera los límites sino que además lo hace en una proporción simplemente alarmante: para cloruros, la norma chilena fija un máximo de 400 mg/L; el agua de ESVAL alcanza 538 mg/L, es decir, supera en un 34,5% la norma.
En relación a los sólidos disueltos, el norma chilena fija un máximo de 1.500 mg/L; el agua de ESVAL llega a los 2.014 mg/L, es decir, sobrepasa la norma en un 34.26%.
Cabe hacer notar que en ambos ítems, la norma chilena resulta notablemente más permisiva comparada a estándares internacionales, como de la Unión Europea y de EEUU: para cloruros, tanto la UE como EEUU imponen un máximo de solo 250 mg/L, y para sólidos disueltos, solo 500 mg/L.
Tal como la evidencia científica lo alerta, la ingesta de cloruros a niveles excesivamente altos incide negativamente en la salud humana, pudiendo generar trastornos digestivos, al sistema nervioso y varios tipos de cáncer, como hepático, de colon y vejiga.
A la luz de estos resultados, nuestra Agrupación estudia ahora las vías legales para poner freno a esta situación, cuyos gravísimos efectos adversos sobre la salud de miles de habitantes de nuestra provincia pueden ser actualmente, por desgracia, solo parcialmente evaluados. Además, pondremos los antecedentes a disposición de las autoridades fiscalizadoras responsables a fin de exigir el cumplimiento de sus funciones.
Por tanto, hacemos una invitación a todos quienes quieran sumarse en esta gestión en pos de nuestra salud, nuestros derechos y nuestra dignidad.
