Hace ya dos años, el 11 de mayo de 2011, el Senado de Chile aprobó el convenio de la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV). Este acuerdo significa, a las claras, que se ceden los derechos de semillas chilenas a grandes empresas del rubro, entre ellas a la tristemente célebre Monsanto, imponiendo, además, aberrantes medidas sobre los campesinos, como la prohibición de guardar sus propias semillas y la obligación, en muchos casos, de sembrar la semilla genéticamente modificada de la multinacional respaldada por la ley.
Como Agrupación nos sumamos a la indignación con la que amplios sectores del país han reaccionado ante tan negligente medida adoptada por nuestros parlamentarios. En votación dividida, el voto favorable de 13 senadores -entre ellos el de Francisco Chahuán, representante de nuestra región- ha dado luz verde para que el monopolio de los organismos genéticamente modificadas (OGM) avance sin contrapesos en nuestros campos.
Frente al alarmante antecedente que hoy se suma de la llamada ley Monsanto, aprobada en marzo pasado por el presidente Obama que blinda a las compañías de semillas transgénicas de toda acción legal en su contra, levantamos nuestra voz para alertar a nuestra comunidad sobre las amenazas que se ciernen, tanto en el campo de nuestras libertades civiles, como en el de nuestra economía y nuestra salud.
En el marco de la convocatoria ciudadana mundial para manifestarse este sábado 25 de mayo contra el avance de las multinacionales de los OGM, nuestra Agrupación insta a nuestra comunidad a que se informe respecto a esta álgida cuestión y adoptemos juntos una voz más activa y participativa.
Agrupación Cultural Educativa Ecológica Artística
ISLA NEGRA
Mayo 2013
